domingo, 3 de febrero de 2019

MASCULINIDADES IGUALITARIAS



Existen muchas formas de ser niño¡¡ Si miramos a nuestro alrededor vemos multitud de formas de ser y estar. Las aulas están llenas de niños diversos que rompen las normas de género y se atreven a ser diferentes. Pero esta diversidad convive bajo la sombra todopoderosa de un patriarcado que sigue marcando pautas para perpetuarse en el tiempo a través de discursos e idearios que generan desigualdades.

Frente a la riqueza de las diferencias nos encontramos con un modelo predominante y obsoleto de masculinidad que sigue vigente como referente único y dominante. Esta masculinidad hegemónica se construye a partir de la negación y el rechazo de todo lo que está vinculado a lo femenino. Ser hombre significa lo contrario de ser mujer. Los niños interiorizan su masculinidad a través de un proceso de socialización que les dicta un guión de vida basado en conductas relacionadas con el poder, el riesgo constante para autoafirmarse como héroes-hombres y el aprendizaje de la violencia a través de los juegos y el ocio como la mejor vía para la resolución de conflictos personales y sociales. De los niños se espera que tengan una vida marcada por el éxito, la independencia emocional, el liderazgo, el prestigio y la autoafirmación. Las niñas, por el contrario, reciben mensajes más contradictorios porque se les insta a ser independientes y a la vez, a ser cuidadosas, conciliadoras, empáticas y exitosas en el amor. Las cargas de género van en ambas direcciones, niñas y niños sufren el aprendizaje de normas basadas en estereotipos y roles de género que no les permiten elegir libremente el camino a seguir. Pero, no podemos perder de vista que la cultura de género dota de poder y privilegios a los niños desde que nacen frente a una realidad incuestionable; niñas y mujeres siguen sufriendo una violencia estructural basada en el machismo.

La Coeducación apuesta por el desaprendizaje de la masculinidad hegemónica. y crea nuevos idearios para la construccion de masculinidades igualitarias y corresponsales basadas en el respeto mutuo, la igualdad, la no violencia y el reparto equitativo de los espacios....


*Integra la educación emocional con perspectiva de género en las aulas para que niñas y niños puedan mostrar y gestionar sus emociones de forma libre y saludable.

* Facilita modelos de masculinidad disidentes, cooperativos, coresponsables, pacíficos y liberadores.

* Invita a los niños a ser libres en la elección de juguetes, colores, actividades de ocio y expectativas de vida.

* Enseña a los niños a colaborar en el trabajo doméstico y de cuidados desde los primeros años de vida. Educar desde la Corresponsabilidad favorece su autonomía y su autocuidado.

* Favorece la creación de espacios y actividades compartidas con las niñas para que aprendan a crear lazos de camaradería, la igualdad, la afectividad y el respeto.

* Niñas y niños aprenden de sus mayores. ¡ Practica con el ejemplo¡.

* Desecha el androcentrismo como medida de todas las cosas visualizando y valorando las aportaciones de las mujeres y las niñas en todos los ámbitos de la vida para enriquecer el ideario de niños desde una perspectiva feminista. ¡ Lo femenino también es universal!

*¡No es No! Educa a los niños a respetar a las niñas como sus iguales para evita conductas discriminatorias y abusivas, éste es el primer paso para erradicar la violencia machista.





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